Terapia Gestalt
La terapia Gestalt, nuestro principal referente, es un modelo de psicoterapia que se enmarca dentro de las terapias humanistas o de tercera generación. Estas terapias se caracterizan por su visión integral del ser humano y por poner el acento en la mejora de nuestra calidad de vida y en nuestro desarrollo personal. De esta manera, la terapia empieza a entenderse como un espacio de exploración y una herramienta de autoconocimiento, puestos al servicio de cada persona y de su viaje particular. A lo largo de este viaje iremos redescubriendo nuestros paisajes internos, recuperando nuestra alegría de vivir y reconectando con nuestra espontaneidad.
Un poco de historia
La terapia Gestalt surge en Sudáfrica en los años 40, de la mano del matrimonio de Fritz y Laura Perls. Ella, psicóloga, venía del mundo de la danza. Él, psiquiatra y psicoanalista, venía del teatro. Entre los dos comenzaron a dar forma a una nueva manera de hacer psicoterapia, que venía a romper con las dos corrientes imperantes de su época: el psicoanálisis y el conductismo clásicos.
Como vía alternativa a estos dos planteamientos surge la terapia gestalt, en un intento por contemplar la experiencia humana en toda su complejidad y por humanizar la relación terapéutica: el papel del terapeuta deja de contemplarse como el de un simple observador, y empieza a hablarse de la importancia del vínculo terapéutico en cualquier proceso de sanación y de crecimiento. Esta nueva manera de plantear la psicología fue posible gracias a la influencia que tuvieron en la pareja el arte, la filosofía y las terapias entonces llamadas alternativas: en consulta comienza a plantearse un trabajo que no se restringe a lo puramente verbal, sino que también sacude las emociones, libera al cuerpo, y propone ejercicios teatrales o la práctica de la meditación .
La terapia Gestalt supuso en su momento un cambio de paradigma dentro de la psicología, y aún hoy sigue evolucionando e integrando en su praxis terapéutica todas las herramientas que se hayan demostrado útiles para la consciencia, pues esta es, al fin y al cabo, la labor última de la terapia: iluminar, ofrecer luz, aportar consciencia.
Principios de la terapia Gestalt
En pocas palabras, el objetivo de la terapia Gestalt es ayudarnos a vivir de manera más plena, creativa y consciente, liberando nuestros bloqueos y resolviendo los asuntos inconclusos que arrastramos con nosotros y que obstaculizan nuestro crecimiento. Algunos de los pilares sobre los que se fundamenta para conseguirlo son los siguientes:
– Fomentar la escucha interna, el darse cuenta (insight) o la toma de conciencia.
– Centrarse en el aquí y ahora de la experiencia en curso, esto es, dar prioridad a lo presente frente a lo ausente.
– Desarrollar la responsabilidad sobre uno mismo, es decir, hacerse cargo con claridad y honestidad de lo que uno siente, piensa, hace o deja de hacer.
– Una profunda confianza en la sabiduría del organismo, en el significado de sus crisis y en su capacidad de autorregulación.
En conclusión
Lo que hace la terapia Gestalt es ayudarnos a contactar con nuestras necesidades, nuestros deseos y nuestras carencias, para acercarnos a llevar una vida más auténtica y a definir nuestro proyecto vital. A lo largo de esta travesía el terapeuta se ofrece como sostén, como guía y como compañero, ayudándonos a descubrir qué clase de vida queremos construir, y cuáles son las herramientas con las que contamos para conseguirlo.
A lo largo de nuestra vida, inevitablemente, vamos acumulando una serie de heridas, de historias abiertas, de despedidas frustradas. Todas ellas dejan una marca en nuestro cuerpo, de la misma manera que lo haría una lesión física: a veces se manifiestan en forma de preocupación o tristeza excesivas, falta de motivación, desorientación, o dificultades a la hora de relacionarse o de llevar una vida plena.
La terapia Gestalt entiende que estos síntomas son indicios de que hay procesos más profundos en crisis. Lo que trata de hacer es ahondar en nuestro interior para alcanzar la raíz del problema, y disolverla a través de la psicoterapia; de la misma manera que un fisioterapeuta trabaja sobre las contracturas: con tiempo, mimo, y paciencia.
Tarifas
Sesiones de psicoterapia, presencial u online
Precio por sesión de una hora de terapia individual.
Precio por sesión si se adquiere un bono de 4 sesiones, por 140€.
Precio por sesión si se adquiere un bono de 8 sesiones, por 240€.
